Con motivo del Día Mundial del Turismo que se celebra hoy, con el lema “Turismo para todos: promover la accesibilidad universal”, los expertos de The Valley Digital Business School han elaborado un informe en el que recogen los diez beneficios principales que las nuevas tecnologías han supuesto para el sector.
Para estos expertos en tecnologías digitales, el sector turístico constituye el “ejemplo perfecto” de cómo la digitalización del usuario ha sido capaz de transformar un modelo de negocio. Desde la escuela de negocios, especializada en el sector digital, han destacado el hecho de que la adecuación a la demanda, “de un consumidor cada vez más informado, exigente, con gran capacidad de influencia y que vive a golpe de click”, ha ocasionado una transformación en los procesos, en los productos ofertados y en el surgimiento de nuevos nichos de negocio.
Los 10 principales cambios que se destacan en el informe son los siguientes:
Accesibilidad universal. Quizá, es el beneficio más importante al que están contribuyendo las nuevas tecnologías. Los conocidos como ‘destinos inteligentes’ están propiciando que, incluso personas con discapacidad o problemas de movilidad, tengan experiencias satisfactorias.
Comodidad, rapidez y disponibilidad inmediata de información. Compras o reservas en pocos minutos, sin desplazarse al punto físico de venta, desde diferentes dispositivos y comparando precios y calidades, sin perder de vista el acceso instantáneo a todo tipo de informaciones: consejos para el viajero, meteorología, restaurantes recomendados de la zona y… mucho más.
Precios más flexibles. Las ofertas y el turismo low cost ha ganado terreno con el target de moda del turismo actual: la generación Millennial; jóvenes de entre 18 y 34 años, hiperconectados y que realizan serias comparaciones antes de formalizar su compra online. Estos estudios de mercado que acostumbran a realizar, antes de adquirir, ha llevado a las empresas a establecer precios más competitivos y lanzar ofertas low cost.
Experiencias exclusivas y personalización del servicio turístico. La personalización de los servicios en función del perfil del usuario, el momento de compra, el patrón de consumo y la localización es el cambio que ha traído consigo el big data y la gestión inteligente del marketing turístico.
Por otro lado, la tendencia en auge a disfrutar de destinos más auténticos frente al turismo tradicional está potenciando la utilización de tecnología tal como el IoT (internet de las cosas), la realidad aumentada, loswearables facilitadores de procesos o actividades lúdicas, ectétera.
Empoderamiento del turista. El marketing ha cambiado: ahora es el cliente el centro de la estrategia publicitaria por el enorme poder de influencia que tiene en el mundo online.
Interactividad con el cliente. Debido a este empoderamiento, para cualquier producto turístico es muy importante retroalimentarse de las aportaciones que el turista 2.0 traslada a través de las redes sociales.
Destinos turísticos inteligentes. Cada vez son más las localizaciones que garantizan el desarrollo sostenible, una accesibilidad excelente o la integración del visitante con el entorno. Ejemplos de esto son las redes wifi gratuitas, los videoguías o auto guías, los beacons que envían información de interés turístico según la situación…
Auge de la economía colaborativa. Aunque pueda suponer una amenaza para las empresas turísticas tradicionales, el boom de la economía colaborativa ha supuesto una mayor afluencia de turistas y el aprovechamiento de elementos infrautilizados.
Presencia global en el mercado turístico internacional. Con internet, los empresarios turísticos pueden introducirse más fácilmente en mercados extranjeros, pudiendo aumentar su masa potencial de clientes o la asociación con empresas, bien sean de su mismo sector o de otras industrias.
Agilización de procesos y reducción de costes. Muchos hoteles ya funcionan mediante aplicaciones que permiten automatizar procesos como reservas de clientes, gestión de materiales o controles de calidad. Esto, al tiempo que agiliza procesos, reduce errores de gestión, aumenta la productividad y mejora el posicionamiento de marca. Además, la posibilidad de acceder a toda la información a través de Internet y la disminución de las comisiones a terceros por la venta directa en web han propiciado una reducción de costes que beneficia directamente al turista.
Fuente: Tecno Hotel News